Caminando tan lento como mis piernas lo permitían seguí la ruta de tantos recuerdos, sin darme cuenta que la noche estaba por terminar, pero no importaba qué, ni cuanto podía pasar, hoy ya no estabas y algo en mi tenia que continuar, lo sé bien no sera fácil, te extrañare como se extrañan las primaveras cuando el frió escruta el alma, te extrañare como extraño las estrellas en las noches sombrías, así de tanto te extrañare; pero tengo que decir adiós por que es necesario para mi y para ti también; ¡sí también para ti!, por que aunque tu esfuerzo por sonreír es grande, ya no hallo la chispa con la que me conquistaste, te libro de mi, del pesar de verme cada mañana y desear estar en otro lado, te libro de mis noches de desvelo mirándote dormir, de mis preocupaciones cuando enfermas y de mis ganas de abrazarte siempre. Te libro de mi pesada forma de ser contigo, de empalagarte con mis besos, pero sobre todo te libro de mí por que nunca podrás quererme tanto como yo a ti. Karinee...